Noticia del 12 de Febrero del 2009
COMENTARIO: Ejemplo de que se debe enseñar a nuestros jóvenes el uso de Internet y a tener conciencia sobre lo que puede haber y encontrar.
Tienen entre 4 y 18 años y fueron víctimas de hackers. Hay preocupación porque muchos, por pudor, no le informan a los adultos.
Según la encuesta realizada online, el 25 por ciento de los chicos de entre 4 y 18 años se animó a contarle a sus papás que habiendo ingresado al link de un correo electrónico basura, o después de bajar de Internet películas o series de TV infantiles, la trampa de los hackers redireccionó la búsqueda hacia páginas pornográficas o sadomasoquistas, que ellos no querían ver.
La técnica maliciosa se llama "phishing" y es empleada tanto contra adultos como contra niños. Consiste en el envío de un correo electrónico falso que invita a ingresar a un link que, en el caso de los adultos redirecciona a una página falsa de un banco. En el caso de los chicos, a una supuesta página de un sitio infantil que posteriormente lleva a un sitio porno.
Si la estrategia de los hackers es aún más sofisticada, los delincuentes del "phishing" colocan un programa de computación en el software que se usa para bajar películas o programas de TV infantiles que, inexorablemente, reenvían una y otra vez a una página porno o sádica. "Es una técnica de ingeniería social para capturar información de los usuarios, mostrar contenidos inapropiados para la madurez de los chicos y generar otra red ilícita: el secuestro o la pornografía infantil", detalló a Clarín, Cristian Linacre, gerente de seguridad y privacidad de Microsoft para Latinoamérica.
Una de las respuestas que más preocupa al equipo de informática de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) es que la mitad de los padres opina que no es necesario supervisar más de lo que lo hacen, aquello que sus hijos miran en Internet o con quienes interactúan. "Así como los padres supervisan a qué hora va a bailar su hijo y con quién, lo mismo debieran hacer con la actividad que sus hijos mantienen por Internet. Con mayor razón en un contexto virtual donde al no poder hacer contacto cara a cara uno no sabe, en verdad, quién está del otro lado", enfatizó una de las pediatras a cargo del estudio, Paula Otero, del Hospital Italiano de Buenos Aires.
La aflicción de los especialistas es aún mayor porque aunque están satisfechos con el hecho de que en los últimos tiempos aumentó la comunicación entre padres e hijos referida a los recaudos que hay que tomar en Internet, aún "muchos niños por pudor o temor no informan a los adultos sobre estas circunstancias", afirma el estudio de la SAP "Uso de Internet en hogares con niños de entre 4 y 18 años. Control de los padres sobre este uso". De modo que, mucho más que el 25 por ciento de los chicos deben haber caído en la trampa de los hackers pero no lo informó a sus papás.
Los resultados de la investigación surgen de una encuesta online hecha por el grupo de informática de la SAP con el propósito de analizar cuál es el nivel de control que los padres ejercen sobre sus hijos cuando éstos están conectados a Internet. El 42 por ciento de los entrevistados tiene hijos de entre 4 y 8 años; el 26 por ciento, de entre 9 y 12 años; y el resto, de entre 13 y 18 años.
http://www.clarin.com/diario/2009/02/12/um/m-01857675.htm
COMENTARIO: Ejemplo de que se debe enseñar a nuestros jóvenes el uso de Internet y a tener conciencia sobre lo que puede haber y encontrar.
Tienen entre 4 y 18 años y fueron víctimas de hackers. Hay preocupación porque muchos, por pudor, no le informan a los adultos.
Según la encuesta realizada online, el 25 por ciento de los chicos de entre 4 y 18 años se animó a contarle a sus papás que habiendo ingresado al link de un correo electrónico basura, o después de bajar de Internet películas o series de TV infantiles, la trampa de los hackers redireccionó la búsqueda hacia páginas pornográficas o sadomasoquistas, que ellos no querían ver.
La técnica maliciosa se llama "phishing" y es empleada tanto contra adultos como contra niños. Consiste en el envío de un correo electrónico falso que invita a ingresar a un link que, en el caso de los adultos redirecciona a una página falsa de un banco. En el caso de los chicos, a una supuesta página de un sitio infantil que posteriormente lleva a un sitio porno.
Si la estrategia de los hackers es aún más sofisticada, los delincuentes del "phishing" colocan un programa de computación en el software que se usa para bajar películas o programas de TV infantiles que, inexorablemente, reenvían una y otra vez a una página porno o sádica. "Es una técnica de ingeniería social para capturar información de los usuarios, mostrar contenidos inapropiados para la madurez de los chicos y generar otra red ilícita: el secuestro o la pornografía infantil", detalló a Clarín, Cristian Linacre, gerente de seguridad y privacidad de Microsoft para Latinoamérica.
Una de las respuestas que más preocupa al equipo de informática de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) es que la mitad de los padres opina que no es necesario supervisar más de lo que lo hacen, aquello que sus hijos miran en Internet o con quienes interactúan. "Así como los padres supervisan a qué hora va a bailar su hijo y con quién, lo mismo debieran hacer con la actividad que sus hijos mantienen por Internet. Con mayor razón en un contexto virtual donde al no poder hacer contacto cara a cara uno no sabe, en verdad, quién está del otro lado", enfatizó una de las pediatras a cargo del estudio, Paula Otero, del Hospital Italiano de Buenos Aires.
La aflicción de los especialistas es aún mayor porque aunque están satisfechos con el hecho de que en los últimos tiempos aumentó la comunicación entre padres e hijos referida a los recaudos que hay que tomar en Internet, aún "muchos niños por pudor o temor no informan a los adultos sobre estas circunstancias", afirma el estudio de la SAP "Uso de Internet en hogares con niños de entre 4 y 18 años. Control de los padres sobre este uso". De modo que, mucho más que el 25 por ciento de los chicos deben haber caído en la trampa de los hackers pero no lo informó a sus papás.
Los resultados de la investigación surgen de una encuesta online hecha por el grupo de informática de la SAP con el propósito de analizar cuál es el nivel de control que los padres ejercen sobre sus hijos cuando éstos están conectados a Internet. El 42 por ciento de los entrevistados tiene hijos de entre 4 y 8 años; el 26 por ciento, de entre 9 y 12 años; y el resto, de entre 13 y 18 años.
http://www.clarin.com/diario/2009/02/12/um/m-01857675.htm
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