Noticia del 26 de Febrero del 2009
La Fiscalía de la Audiencia de Gipuzkoa solicita penas que suman once años de prisión para un presunto pederasta que instaló cámaras ocultas en su propia casa para grabar y espiar a la hija de su pareja, una joven menor de edad. El ministerio público reclama que el acusado indemnice con 12.000 euros a la menor por los perjuicios morales que le ha podido ocasionar.
El juicio por este caso tendrá lugar la próxima semana en la Sección Primera de la Audiencia de Gipuzkoa.
Los hechos, según se indica en el escrito de calificación redactado por el ministerio público, tuvieron lugar en fechas anteriores al 15 de octubre de 2007 cuando el acusado, José Luis M.Z., instaló varias cámaras de vídeo en diversas dependencias del domicilio que compartía con su pareja y la hija de ésta, que en aquellas fechas no había alcanzado la mayoría de edad.
La Fiscalía señala que el inculpado colocó dichas cámaras sin la autorización de ninguna de las víctimas, en la habitación de la menor así como en el baño, «para grabar subrepticiamente escenas de la vida íntima de la menor», precisa el fiscal, para usarlas posteriormente para su propio disfrute sexual.
Anotación de minutos
El ministerio público precisa que el inculpado, una vez obtenidas las grabaciones, extractó los pasajes de contenido sexual más explícito, principalmente aquellos en los que la joven se cambiaba de ropa o realizaba actos de «autoestimulación erótica». El inculpado, según la Fiscalía, anotaba el minuto exacto del metraje y el contenido de la escena para su mejor localización en el momento del visionado.
El acusado fue detenido por el Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil después de que en su ordenador se hallasen, además de los vídeos mencionados de la hija de su pareja, otros archivos informáticos que había obtenido a través de internet y que contenían escenas de sexo con menores de trece años. En algunos de ellos se exhibían grabaciones de actos de violencia sexual contra menores de dicha edad.
La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de dos delitos, uno de difusión de pornografía infantil por el que pide ocho años de prisión, y otro de descubrimiento de secretos, por el que solicita tres años, además de una multa de 3.600 euros. Igualmente, reclama que se prohiba al inculpado acercarse a menos de 500 metros de la hija de su pareja durante un periodo de cinco años.
Indemnización
La acusación pública solicita también que el inculpado indemnice con 12.000 euros a la menor por los daños morales ocasionados.
Dentro de esta misma investigación, la Guardia Civil detuvo también a Félix Pablo V.L., que presuntamente descargó y compartió con otros usuarios de internet carpetas que contenían escenas de sexo explícito entre menores de edad.
Todo el material informático, fotográfico y de vídeo que los agentes intervinieron a los acusados fue decomisado, mientras que los ordenadores, cámaras y material regrabable, al ser bienes de lícito consumo, se venderán para con el dinero obtenido hacer frente a las responsabilidades pecuniarias de los acusados.
http://www.diariovasco.com/20090226/al-dia-local/juzgan-hombre-instalo-camaras-20090226.html
La Fiscalía de la Audiencia de Gipuzkoa solicita penas que suman once años de prisión para un presunto pederasta que instaló cámaras ocultas en su propia casa para grabar y espiar a la hija de su pareja, una joven menor de edad. El ministerio público reclama que el acusado indemnice con 12.000 euros a la menor por los perjuicios morales que le ha podido ocasionar.
El juicio por este caso tendrá lugar la próxima semana en la Sección Primera de la Audiencia de Gipuzkoa.
Los hechos, según se indica en el escrito de calificación redactado por el ministerio público, tuvieron lugar en fechas anteriores al 15 de octubre de 2007 cuando el acusado, José Luis M.Z., instaló varias cámaras de vídeo en diversas dependencias del domicilio que compartía con su pareja y la hija de ésta, que en aquellas fechas no había alcanzado la mayoría de edad.
La Fiscalía señala que el inculpado colocó dichas cámaras sin la autorización de ninguna de las víctimas, en la habitación de la menor así como en el baño, «para grabar subrepticiamente escenas de la vida íntima de la menor», precisa el fiscal, para usarlas posteriormente para su propio disfrute sexual.
Anotación de minutos
El ministerio público precisa que el inculpado, una vez obtenidas las grabaciones, extractó los pasajes de contenido sexual más explícito, principalmente aquellos en los que la joven se cambiaba de ropa o realizaba actos de «autoestimulación erótica». El inculpado, según la Fiscalía, anotaba el minuto exacto del metraje y el contenido de la escena para su mejor localización en el momento del visionado.
El acusado fue detenido por el Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil después de que en su ordenador se hallasen, además de los vídeos mencionados de la hija de su pareja, otros archivos informáticos que había obtenido a través de internet y que contenían escenas de sexo con menores de trece años. En algunos de ellos se exhibían grabaciones de actos de violencia sexual contra menores de dicha edad.
La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de dos delitos, uno de difusión de pornografía infantil por el que pide ocho años de prisión, y otro de descubrimiento de secretos, por el que solicita tres años, además de una multa de 3.600 euros. Igualmente, reclama que se prohiba al inculpado acercarse a menos de 500 metros de la hija de su pareja durante un periodo de cinco años.
Indemnización
La acusación pública solicita también que el inculpado indemnice con 12.000 euros a la menor por los daños morales ocasionados.
Dentro de esta misma investigación, la Guardia Civil detuvo también a Félix Pablo V.L., que presuntamente descargó y compartió con otros usuarios de internet carpetas que contenían escenas de sexo explícito entre menores de edad.
Todo el material informático, fotográfico y de vídeo que los agentes intervinieron a los acusados fue decomisado, mientras que los ordenadores, cámaras y material regrabable, al ser bienes de lícito consumo, se venderán para con el dinero obtenido hacer frente a las responsabilidades pecuniarias de los acusados.
http://www.diariovasco.com/20090226/al-dia-local/juzgan-hombre-instalo-camaras-20090226.html
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