Señores Fiscales...

Siempre, desde que comencé este blog, he intentado debatir y tratar el tema de la Pornografía Infantil con objetividad sin realizar ataques de forma automática a quienes realicen estas descargas o consuman este material.

Dentro de esta objetividad, que en ciertos periodos habrá sido mayor o menor, mi condición personal impide una objetividad total hacia algo que a la gran mayoría nos repugna tan sólo con la idea, pero siempre he intentado abordar el tema evitando centrar la noticia/artículo/documento bajo mi punto de vista personal.

Soy consciente, o al menos lo intento, del daño moral, psicológico o físico, y hago todo esta campaña en pro de la indemnidad y por la dignidad de esos niños y niñas que han sido abusados, que han sufrido más de lo que pudiésemos imaginar y que otros sufrirán secuelas durante el resto de su vida... tanto dolor, tanto sufrimiento... ¿para qué? para saciar la lascividad de unos pocos? ¿Para saciar el "amor" con el que disfrazan el hambre sexual de unos pocos?

Triste, triste, tan triste...

Pero si bien podemos, entre todos, hacer algo para remendar este daño, para concienciar de este dolor, para proteger a esos niños y niñas que ya han sufrido, también debemos impedir la pamdemia de acusaciones y temor hacia un tema tan delicado como éste.

Es por esto que pido a los Señores de la Fiscalía, que bajo su objetividad desde la que deben valorar los hechos y los daños, intenten valorar también las situaciones de usuarios en Internet que se han visto inmersos en esta tela de araña tan impunemente urdida. Pese a que soy partidario y defensor de los procedimientos que actualmente la BIT, incluyendo a la UDEF de Cataluña, o la Brigada de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil usan, es cierto que hay usuarios de redes del P2P que han visto truncadas sus vidas por haber descargado algún fichero de Pornografía Infantil en sus ordenadores, incluyendo meses de sus vidas pendientes del procedimiento legal y judicial que algo así supone.

Han habido casos en que por un solo archivo de estos, incluso después de haberlos borrado y habiéndose constatado que no era el interés de encontrar este material por parte del acusado, se le ha llevado a juicio igualmente solicitando una pena de varios meses, poco más de un año o multa, e incluso peticiones de la pena mínima por difusión: 4 años... La carga emocional que provoca la tachadura de este delito, la dolencia psicológica que provoca un prodecimiento de esta envergadura por estos motivos, puede dañar la salud mental de implicado...

Por ello pido a los Señores Fiscales que midan sus actuaciones y que intenten discernir siempre el daño hecho y la voluntariedad, hablando concretamente de casos en que uno o pocos archivos entre miles son hallados pero se demuestra claramente que no hay una intencionalidad por obtener este material.

Ir a la cárcel, a cualquiera le marcará de por vida, destrozándole la misma.

Por esto mismo pido, y suplico, que siempre se tomen medidas, pero que sean dentro de una escala medible en cuanto a la gravedad del delito y de los hechos, que se diferencie unos de otros, consumidores de meras víctimas ocasionales de un p2p desordenado y truncado.