Artículo del 4 de Marzo del 2009
"Little Miss Perfect", por We TV, es un concurso donde las nenas se pintan, peinan y visten como modelos adultas.
Otro reality está en el ojo de la tormenta. Esta vez no se trata de obesos intentando bajar de peso, ignotos conviviendo en una casa o gente sobreviviendo en una isla. En Estados Unidos, la ira de los críticos la despertó ahora un concurso de belleza infantil -Little Miss Perfect, por We TV-, que busca a la niñita más perfecta, aquella que luzca exactamente como una muñeca de estantería.
La polémica no sólo está dada porque las pequeñas deben ajustarse a un patrón de belleza, sino que atraviesan por la experiencia de vivir como modelos adultas: pasan horas en las salas de maquillaje, aprenden a posar, a caminar sobre tacos, lucen decenas de vestidos y emulan a mujeres mayores.
Por YouTube pueden verse al gunos envíos del programa en el que aparecen las diminutas "muñequitas" de cuatro o cinco años con kilos de rubor y rimmel, sometidas a la tiranía de horas de peinados y al enfrentamiento con otras participantes. En muchos casos los mismos padres dejan al descubierto su extremo narcisismo.
Muchos medios salieron a "disparar" contra el ciclo, dada una historia real que ocurrió trece años atrás, ligada a los concursos de belleza infantiles: Jo Benet Ramsey, una niña de seis años de edad, fue encontrada estrangulada en el sótano de su casa. Era hija de un empresario y una ex Miss, quien le enseñó a comportarse y a actuar como una modelo profesional. La nena se transformó en reina de la belleza y trabajaba para algunas marcas. Algunos vincularon el crimen (aún sin resolver) a la pornografía infantil; la mayoría se lamentó por la suerte de esa niña "esclava". El debate continúa.
http://www.clarin.com/diario/2009/03/05/espectaculos/c-00403.htm
"Little Miss Perfect", por We TV, es un concurso donde las nenas se pintan, peinan y visten como modelos adultas.
Otro reality está en el ojo de la tormenta. Esta vez no se trata de obesos intentando bajar de peso, ignotos conviviendo en una casa o gente sobreviviendo en una isla. En Estados Unidos, la ira de los críticos la despertó ahora un concurso de belleza infantil -Little Miss Perfect, por We TV-, que busca a la niñita más perfecta, aquella que luzca exactamente como una muñeca de estantería.
La polémica no sólo está dada porque las pequeñas deben ajustarse a un patrón de belleza, sino que atraviesan por la experiencia de vivir como modelos adultas: pasan horas en las salas de maquillaje, aprenden a posar, a caminar sobre tacos, lucen decenas de vestidos y emulan a mujeres mayores.
Por YouTube pueden verse al gunos envíos del programa en el que aparecen las diminutas "muñequitas" de cuatro o cinco años con kilos de rubor y rimmel, sometidas a la tiranía de horas de peinados y al enfrentamiento con otras participantes. En muchos casos los mismos padres dejan al descubierto su extremo narcisismo.
Muchos medios salieron a "disparar" contra el ciclo, dada una historia real que ocurrió trece años atrás, ligada a los concursos de belleza infantiles: Jo Benet Ramsey, una niña de seis años de edad, fue encontrada estrangulada en el sótano de su casa. Era hija de un empresario y una ex Miss, quien le enseñó a comportarse y a actuar como una modelo profesional. La nena se transformó en reina de la belleza y trabajaba para algunas marcas. Algunos vincularon el crimen (aún sin resolver) a la pornografía infantil; la mayoría se lamentó por la suerte de esa niña "esclava". El debate continúa.
http://www.clarin.com/diario/2009/03/05/espectaculos/c-00403.htm
